A/C Necesidad básica?

Durante todo el día de ayer, desde temprano, sentía una terrible ansiedad que no podía explicar; no había nada que pudiera estar ocasionando ese sentimiento, al contrario, estuve en lugares lindos con personas que quiero.

Almorcé en casa de mi abuela Titina junto con 3 de mis tíos y un primo muy simpático que esta estudiando para ser Timonel, y de hecho se parece un poco a Jack Sparrow. Luego tuve la agradable visita de mis suegros, con los que durante largo rato debatimos con una intensa conversación, sobre cuánto deben durar los matrimonios.

Llegaron las 11 de la noche y con ellas la solución al enigma de mi estado de ánimo: estaba estresada porque sabía que el aire acondicionado estaba dañado!!!.

Empecé a dar vueltas en la cama y no lograba conciliar el sueño del calor, me saqué la sábana de encima pero el insomnio de sofoco estaba constante acompañándome. En un momento llegué a hacer paces con la idea que no iba a dormir en toda la noche, hasta que se me ocurrió una simple solución: Abrir la ventana!.

Lo hice con un poco de miedo porque finalmente no vivo en una zona muy segura aqui en Guayaquil, aunque en realidad ya ningun sitio es seguro aqui. Milagrosamente empecé a caer hipnotizada en los brazos de Morfeo... -Dormir, dormir, dormir, que bueno que es dormir, escuchaba a lo lejos cantar a mi subconsciente mientras iba perdiendo mis capacidades.

Un grito en medio de la noche me sobresaltó, podía escuchar claramente a una niña gritando: Maaaahhh, maaahhhh. Pensé que le habría pasado algo a mi hija pequeña en el otro cuarto, y corrí a abrir la puerta, pero estaba plácidamente dormida en su camita diminuta con el cuarto congelado de frio.

Pensé: talvez y solo fue un sueño, y traté de volver a mi hipnótico estado, pero el grito me volvió a estremecer. En ese momento caí en cuenta que era el gato de la cuadra enamorando a diestra y siniestra. Supe en ese momento que ese gato tendría más suerte que yo, podría satisfacer sus bajos instintos, mientras yo no podría satisfacer mis ansias de descansar!!!.

La actividad amorosa del gato continuó con la gata de al lado, la de en frente, la de la esquina, la de la otra cuadra... en fin, insaciable minino.

Empecé a cranear la manera con la que haría que el gato coqueto aquel desaparezca, asi que en lugar de contar ovejas, me dormí pensando en las múltiples opciones con las cuales yo lograría reir al último mientras lo veía al gatúbelo a la vera del camino.

Como conclusión puedo aportar que en Guayaquil es dificil dormir sin aire acondicionado, pero no imposible. Si no fuera porque me necesitaba despertar hoy muy temprano hubiera disfrutado mucho más de l0 absurdo y cómico de la situación.

Creo que hasta que no se arregle el a/c, me bañaré con agua helada antes de dormir, dejaré la ventana abierta y me prepararé para el resto de sorpresas que me traerá la noche.